Los hoyos de la puerta, es un poco chuzco el titulo de hoy, pero creo que es un gran momento para tocar este tema, en alguna ocasión, entre en la casa de un amigo, cabe mencionar que es un poco mayor que yo, tanto que su hijo, me invito a jugar vídeo juegos a su recámara, mi amigo tenia una pequeña discusión con su mujer en la cocina y creí muy propio ir con el hijo de mi amigo, al sentarnos frente a la televisión, me di cuenta que la puerta tenia varios hoyos en ella, lo que llamo mi atención, a lo que no puede resistir y pregunte.
¿Que te pusiste a jugar con los darlos en la pared? ¿O colgaste un puerco espín? después de preguntar, ambos nos hachamos a reír, con un semblante un poco avergonzado, me comenta, te puedo platicar algo y no se lo dices a nadie?, obviamente respondí, que podía decírmelo, entonces pusimos pausa al partido de vídeo juego que teníamos, que por cierto, el me iba ganando, pero no le digan a nadie, y se levanto a cerrar la puerta con seguro, yo sorprendido por tal acción, me acomode en el sillón y preste toda mi atención.
Bueno, me dice, un día mi mama me estaba regañando y yo discutía con ella, en eso, llega mi padre y en ese instante me oye decirle a mi madre, ES QUE TU NO ME ENTIENDES, ESTAS LOCA, P......NCHE VIEJA, a lo que obviamente el reacciona y se mete en la discusión, levanta muy fuerte la voz y me dice, ve a tu cuarto inmediata mente, a lo que yo por supuesto que obedezco, el se queda con mi madre y en unos minutos mi madre deja de llorar, sin salir de mi cuarto estaba pendiente de todo, y, en cuanto percibí que mi padre venia cerré la puerta y me senté en mi cama, viendo hacia la puerta y con actitud de molestia, mi padre defendió a mi madre y a mí, ni me pregunto.
Al entrar mi padre a mi recámara, se sienta junto a mi y me mira muy tiernamente(eso me sorprendió de sobremanera, pues creí que venia muy enojado) y poco a poco se recarga en mi hombro y me abraza, me da un apretón con su abrazo y luego me mira a los ojos, ¿como estas hijo?
La verdad me saco completamente de onda y me quede pasmado, no tube mas remedio que responderle, ¡muy sacado de onda papá! pensé que vendrías a defender a mi madre y a regañarme, pero me abrazas y me vuelves loco, el me ve y se ríe, me vuelve a abrazar y me dice, mira hijo de mi corazón, haga lo que yo haga, el que tomara la decisión de que si esta bien o mal lo que hiciste aya abajo, solo seras tu, yo quiero pedirte un favor, puedo? es obvio que le dije que si, me dice el joven. ¿Que puedo hacer por ti, Padre?
Mira, ya hemos notado que tienes un carácter muy fuerte, en algunas ocasiones muy explosivo, y tal vez, es un poco en parte nuestra culpa, pero sin importar quien es el culpable, lo importante es que logres controlarlo, por eso te pediré que cada vez que tu te enojes, te desesperes, o te sientas frustrado, vengas corriendo sin parar en ningún lado, y tomes un clavo, el martillo y lo claves en la puerta, así cuando entres en calma, veraz que estuviste muy molesto, luego te platicare que hacer, si logras aprender que debes controlar tu temperamento y lo rediriges hacia otras cosas mas positivas, habrás aprendido una de las mejores lecciones de la vida hijo.
Al pasar 2 semanas, la puerta tenia, 12 clavos, al pasar tres semanas, solo eran 15 clavos, poco a poco agregaba menos clavos por semana, lo que a mi, y sobre todo a mi familia, se le fue notando, tanto, que ya platicaba con mi madre sin gritar, un buen día, le pedí a mi padre hablar con el, sobre los clavos, fuimos a mi cuarto y tuvimos esta platica, padre, creo que he aprendido la lección, ya logro controlar mi carácter, ya soy una mejor persona, no lo crés así? mi padre con una sonrisa me miro y me abrazo, hijo mi, la elección apenas comienza, a que te refieres padre, mira hijo, ahora, de hoy en adelante, cada vez que pase algo, en lo que tu te enfades mucho, y logres controlar ese enojo, sal corriendo y quita uno de los clavos que tiene la puerta, la ultima conversación la tendremos cuando hayas acabado de quitar los clavos.
Pasaron al rededor 2 meses, en ese momento, me sentí muy contento, por fin iba a saber de que estaba hablando mi padre, corriendo, incluso con el ultimo clavo en la mano, llego a donde esta el y le digo, mira papá, lo que traigo en la mano. Mi madre un poco des ubicada nos mira y dice, no quiero saber de que se trata, jajajajajajaja, mi padre, deja su taza de café y me dice que vayamos a la habitación, ya en mi cuarto, el cierra la puerta y me dice, ¿que vez? yo respondo, la puerta papá, por que? el me vuelve a preguntar, ¿que vez en la puerta hijo? los hoyitos de los clavos papá, exacto hijo, esa es la verdadera lección hijo, un poco des tanteado le comento, sabes, no entiendo papá, ya controle mi enojo al evitar discutir y salir corriendo a clavar los clavos, luego, lo controle al darme cuenta que no debo ser explosivo y fui controlando cada vez que me enojaba, logrando quitar así lo clavos que antes coloque, y ahora que solo están los hoyos en la puerta, me dices, que esa es la lección. podrías explicarme papá por favor.
Mira hijo, cuando tu ofendes a una persona, esta es como la puerta, recibe un clavo en su cuerpo, luego, si te disculpas, esta persona te perdona, le quitas el clavo del cuerpo, pero el que te perdone, no significa que se le quedo como estaba, es como la puerta, le pusiste clavos, le quitaste clavos y quedaron los estragos de esos clavos, por eso es muy importante que nos fijemos como tratamos a las demás puertas, pues a nadie nos gusta recibir un clavo.
Cuando el joven termino de decir esto, me quede pensativo por un momento, el abrió nuevamente la puerta y regresamos al juego, por unos instantes me di cuenta que muchas veces en mi vida, le he clavado clavos a la gente que me quiere, y aun que me perdonan, siempre quedara esa huella, aprovechando que casi es año nuevo, ese sera uno de mis objetivos para el siguiente año.
Después de un tiempo, escuche esto en forma de reflexión, me agrado muchísimo.
Pd: lo deje ganar.
¿Que te pusiste a jugar con los darlos en la pared? ¿O colgaste un puerco espín? después de preguntar, ambos nos hachamos a reír, con un semblante un poco avergonzado, me comenta, te puedo platicar algo y no se lo dices a nadie?, obviamente respondí, que podía decírmelo, entonces pusimos pausa al partido de vídeo juego que teníamos, que por cierto, el me iba ganando, pero no le digan a nadie, y se levanto a cerrar la puerta con seguro, yo sorprendido por tal acción, me acomode en el sillón y preste toda mi atención.
Bueno, me dice, un día mi mama me estaba regañando y yo discutía con ella, en eso, llega mi padre y en ese instante me oye decirle a mi madre, ES QUE TU NO ME ENTIENDES, ESTAS LOCA, P......NCHE VIEJA, a lo que obviamente el reacciona y se mete en la discusión, levanta muy fuerte la voz y me dice, ve a tu cuarto inmediata mente, a lo que yo por supuesto que obedezco, el se queda con mi madre y en unos minutos mi madre deja de llorar, sin salir de mi cuarto estaba pendiente de todo, y, en cuanto percibí que mi padre venia cerré la puerta y me senté en mi cama, viendo hacia la puerta y con actitud de molestia, mi padre defendió a mi madre y a mí, ni me pregunto.
Al entrar mi padre a mi recámara, se sienta junto a mi y me mira muy tiernamente(eso me sorprendió de sobremanera, pues creí que venia muy enojado) y poco a poco se recarga en mi hombro y me abraza, me da un apretón con su abrazo y luego me mira a los ojos, ¿como estas hijo?
La verdad me saco completamente de onda y me quede pasmado, no tube mas remedio que responderle, ¡muy sacado de onda papá! pensé que vendrías a defender a mi madre y a regañarme, pero me abrazas y me vuelves loco, el me ve y se ríe, me vuelve a abrazar y me dice, mira hijo de mi corazón, haga lo que yo haga, el que tomara la decisión de que si esta bien o mal lo que hiciste aya abajo, solo seras tu, yo quiero pedirte un favor, puedo? es obvio que le dije que si, me dice el joven. ¿Que puedo hacer por ti, Padre?
Mira, ya hemos notado que tienes un carácter muy fuerte, en algunas ocasiones muy explosivo, y tal vez, es un poco en parte nuestra culpa, pero sin importar quien es el culpable, lo importante es que logres controlarlo, por eso te pediré que cada vez que tu te enojes, te desesperes, o te sientas frustrado, vengas corriendo sin parar en ningún lado, y tomes un clavo, el martillo y lo claves en la puerta, así cuando entres en calma, veraz que estuviste muy molesto, luego te platicare que hacer, si logras aprender que debes controlar tu temperamento y lo rediriges hacia otras cosas mas positivas, habrás aprendido una de las mejores lecciones de la vida hijo.
Al pasar 2 semanas, la puerta tenia, 12 clavos, al pasar tres semanas, solo eran 15 clavos, poco a poco agregaba menos clavos por semana, lo que a mi, y sobre todo a mi familia, se le fue notando, tanto, que ya platicaba con mi madre sin gritar, un buen día, le pedí a mi padre hablar con el, sobre los clavos, fuimos a mi cuarto y tuvimos esta platica, padre, creo que he aprendido la lección, ya logro controlar mi carácter, ya soy una mejor persona, no lo crés así? mi padre con una sonrisa me miro y me abrazo, hijo mi, la elección apenas comienza, a que te refieres padre, mira hijo, ahora, de hoy en adelante, cada vez que pase algo, en lo que tu te enfades mucho, y logres controlar ese enojo, sal corriendo y quita uno de los clavos que tiene la puerta, la ultima conversación la tendremos cuando hayas acabado de quitar los clavos.
Pasaron al rededor 2 meses, en ese momento, me sentí muy contento, por fin iba a saber de que estaba hablando mi padre, corriendo, incluso con el ultimo clavo en la mano, llego a donde esta el y le digo, mira papá, lo que traigo en la mano. Mi madre un poco des ubicada nos mira y dice, no quiero saber de que se trata, jajajajajajaja, mi padre, deja su taza de café y me dice que vayamos a la habitación, ya en mi cuarto, el cierra la puerta y me dice, ¿que vez? yo respondo, la puerta papá, por que? el me vuelve a preguntar, ¿que vez en la puerta hijo? los hoyitos de los clavos papá, exacto hijo, esa es la verdadera lección hijo, un poco des tanteado le comento, sabes, no entiendo papá, ya controle mi enojo al evitar discutir y salir corriendo a clavar los clavos, luego, lo controle al darme cuenta que no debo ser explosivo y fui controlando cada vez que me enojaba, logrando quitar así lo clavos que antes coloque, y ahora que solo están los hoyos en la puerta, me dices, que esa es la lección. podrías explicarme papá por favor.
Mira hijo, cuando tu ofendes a una persona, esta es como la puerta, recibe un clavo en su cuerpo, luego, si te disculpas, esta persona te perdona, le quitas el clavo del cuerpo, pero el que te perdone, no significa que se le quedo como estaba, es como la puerta, le pusiste clavos, le quitaste clavos y quedaron los estragos de esos clavos, por eso es muy importante que nos fijemos como tratamos a las demás puertas, pues a nadie nos gusta recibir un clavo.
Cuando el joven termino de decir esto, me quede pensativo por un momento, el abrió nuevamente la puerta y regresamos al juego, por unos instantes me di cuenta que muchas veces en mi vida, le he clavado clavos a la gente que me quiere, y aun que me perdonan, siempre quedara esa huella, aprovechando que casi es año nuevo, ese sera uno de mis objetivos para el siguiente año.
Después de un tiempo, escuche esto en forma de reflexión, me agrado muchísimo.
Pd: lo deje ganar.